Se trata de
programas en los que se busca intencionadamente la combinación con el
entretenimiento, la diversión y el espectáculo. La información pierde
parcialmente su rigurosidad y se contagia de ingredientes espúreos. Por su
parte el espectáculo no se crea en su totalidad, si no que también se ve
sometido a ciertos requisitos informativos. (Es un combinado luego desarrollado
por la televisión y que ha sido la estrella del éxito durante los últimos años.
Esta mezcla es la que ha llevado a utilizar la denominación de programas
"Info show", dentro de los cuales se incluyen los magazines, de talk
show y los reality show).
No se busca
tanto la transmisión informativa cuanto la generación de debates, declaraciones
llamativas, planteamientos de temas arriesgados, al límite de la ley o de los
sentimientos y dolor humano. Es frecuente ver llorar alas personas
entrevistadas y las reacciones de emoción del público asistente. Se crea una
atmósfera cargada de emociones a flor de piel. Todo se contagia de sentimientos
más que de raciocinio. Incluso en los debates de algunos se insita al
acaloramiento, a la argumentación airada, a la defensa radical y apasionada de
las opiniones y hechos.
El morbo, el
voyerismo, el dramatismo se constituyen en elementos integrantes de estos
programas. Se roza, y a veces se sobrepasa, el derecho a la intimidad, al honor
y a la propia imagen de las personas protagonistas del tema que se aborda,
estén presentes o ausentes del estudio
No hay comentarios:
Publicar un comentario